Ilusión, alegría, satisfacción, paz interna, melancolía, esperanza… y miedo. Sí, lo confieso. También tengo miedo.

Y lo celebro. Porque el miedo me hace persona. Y porque el miedo, que es tan sólo una emoción más, me avisa, me informa y también me ayuda a crecer.

Estas son las emociones y sensaciones que me embargan ahora que estoy escribiendo estas líneas con las que inauguro mi blog y que me permiten presentar al mundo mi proyecto, mi propuesta como Coach Profesional.

Hola, mundo!

Han pasado 3 años desde que dimití de mi empleo de agente de viajes para emprender otro viaje que me ha llevado a convertirme en agente del cambio.

Poco antes de tomar la decisión de re-inventarme, descubrí la disciplina del Coaching y me enamoré de ella, porque es una disciplina que transforma, que ayuda a aprender, que permite despertar la  conciencia, que permite crecer y cambiar. Como dice Leonard Walk, el Coaching es el arte de soplar las brasas. Es el arte de despertar y desarrollar los sueños y el talento, los recursos y poder personal de las personas, equipos y colectivos.

¿Sabes? Estamos programados para tener miedo. Vivimos condicionados por miles de prejuicios, paradigmas y creencias limitadoras que frenan nuestro potencial y anulan nuestra autenticidad. Nos han enseñado a temer los cambios, a evitar los errores, a aborrecer los fracasos. Vivimos nuestro día a día detrás de la máscara, la máscara de las falsas emociones. Emociones limitadoras que nos impiden ser nosotros mismos. Nos han programado para vivir desde el piloto automático del «hacer» y nos estamos olvidando de vivir desde el «Ser», desde nuestro «Yo» más auténtico y creativo, desde nuestras emociones más potenciadoras y sinceras.

Y … ¿sabes? Hemos entrado en una nueva era. La era de la conciencia. El mundo, la crisis, nos están dando una lección, y nos están avisando de que necesitamos otra manera de hacer las cosas. Y sobre todo, una nueva manera de «Ser». Todo cambia. El cambio no sólo es normal, sino que es absolutamente necesario. El cambio en nosotros, en las familias, en las empresas, en los países. El mundo reclama cambios, y nos dice que es hora de empezar a vivir desde los valores, desde la creatividad, desde la excelencia, desde las emociones, desde el bienestar, desde la conciencia. El hemisferio derecho cerebral se está reivindicando!  ¿No lo ves?

Tal vez no te has dado cuenta aún, pero cada vez son más las personas que despiertan y deciden romper los viejos paradigmas, deciden re-inventarse, vivir desde los valores y sin miedo, y se atreven a crear la vida que quieren, y a trabajar en la profesión que realmente les apasiona.

Hace tres años yo también desperté y me dejé ayudar. Siento una gratitud infinita a los profesionales, amigos, mentores, libros, cursos y seminarios que han pasado por mi vida y me han ayudado a crecer hasta hoy.

Sinceramente, y creo que a pesar de todo, la vida es maravillosa, un milagro, un regalo que nos han concedido. Una gran oportunidad para que la vivamos con felicidad.

Despierta. Sea cual sea tu sufrimiento, que sepas que en este planeta hay cientos de miles de profesionales expertos en solucionar tu problema. En Amazon, en las librerías, en Internet, encontrarás miles de libros y cursos que dan la respuesta a tus preguntas e inquietudes. Y si tu solo/a no puedes, déjate ayudar. Las personas somos seres sociales interconectados que se necesitan mutuamente para evolucionar y crecer.

Decía Ghandi: «sé el cambio que quieres ver en el mundo». Sobran los comentarios… ¿verdad?

Me presento ante el mundo con este mensaje inaugural: ¡Despierta! Otra manera de vivir y trabajar es posible. Sólo depende de tu actitud hacerlo posible. Y sobre todo, sobre todo, por favor… ¡déjate ayudar!

Te invito a entrar en mi Web, a explorarla y seguirme a través de las redes sociales. Me comprometo a publicar contenidos de valor que te ayudarán que vivas y trabajes de una manera más feliz y consciente.

Seguro que nos iremos viendo, leyendo, hablando y escuchando por aquí…

Con gratitud,

Pere